Doña Luz es la hija del marqués de Villa fría. De procedencia algo dudosa por parte de madre y, sin embargo, reconocida por el marqués, cuando niña, la pequeña Luz vivió en distintos hogares. Al morir el marqués, confía a su hija al cuidado de su administrador Don Acisclo quien la cuida muy bien, ella permanece en el pueblo llevando una vida ejemplar y haciéndose querer por todo el mundo, pero menospreciando a los pretendientes que se le acercaban.