Esta historia se basa en una familia que por su ambición se valía de matar gente obteniendo así dinero fácil, sin importarles tampoco el bienestar entre sus miembros, ya que carecían de valores y en ellos predominaba la mentira, la codicia, el egoísmo, el desamor y la falta de respeto. Uno de los miembros de la familia ve un día el supuesto fantasma de su padre, quien en realidad está vivo pero les hace creer que no precisamente para que no lo maten. La familia quema la casa y huyen con todo lo de valor, con la intensión de cobrar una póliza regresa uno de ellos pero nunca la encuentra