Este relato cuenta la historia de tres personas que desenterraron a una persona prematuramente llamada Henry Armstrong, se dice de éste que era un hombre testarudo y muy enfermo, por lo que no se preocupó mucho y siguió dormido dentro del ataúd, esta era una noche tormentosa y había relámpagos que iluminaban el cielo, unos jóvenes estudiantes de medicina van al cementerio en compañía del sepulturero, para que le desentierre el cadáver y se lo venda, es esta la manera como ellos ganan mas plata de forma ilegal. cuando los jóvenes van al anfiteatro ven el cadáver de Armstrong sobre la mesa de disección con una marca del golpe de azada que le había dado uno de ellos para matarle y cobrar su dinero.