En este cuento se describe la sorprendente muerte de Don Trinidad de Aguirre quien era una persona muy joven, adinerado a montones, de gran presencia y demasiado inteligente. Estaba comprometido con una joven muy hermosa. Pero en noviembre del año 96 sufrió una grave enfermedad de la vista que lo llevó a tenerse que adaptar a unos anteojos de color los cuales le quitarían fuerza a la luz del sol. A raíz de ésto empezaron a presentarse una serie de importantes cambios en su carácter. Los motivos de su cambio se podrán buscar en las notas que dejó antes de quitarse la vida.