El horrible crimen perpetrado en Moscú a finales de 1869 siguiendo órdenes del nihilista Nechayev, seguidor de Bakunin, fue utilizado por Dostoyevski para construir la trama argumental y perfilar los caracteres de los principales personajes de Los endemoniados.
La historia es evanescente, aunque podemos centrarla en la figura de dos protagonistas: Piotr Stepanovich y Nikolai Stavrogin. El primero es un revolucionario cínico y descreído, que intenta formar una célula para socavar la sociedad y llevar a cabo acciones reformistas; el segundo es un joven acomodado, sensual, cruel, mordaz y asocial, capaz de las mayores heroicidades, pero también de las más grandes villanías, que conforman una trama de traición, violencia y asesinato como pocas habrá en la historia de la literatura.