El cuento se desarrolla en medio de una tormenta cuando llama a la puerta de una casa un vendedor de pararrayos. En el breve relato bajo la lluvia y los relámpagos se inicia una lucha simbólica entre el bien y el mal, la religión y la ciencia entre dos personajes anclados a sus creencias. El vendedor, con una actitud inquebrantable, intenta convencer al cliente de la necesidad de su producto en una clásica historia de ventas y con un diálogo brillante entre los protagonistas.