El libro presenta el primer viaje de Colón encaminándose a las Indias pero que comprobó era América. Describe a Colón como un científico y navegante dedicado al estudio de la forma de la tierra y también como un oportunista que sabía de anemano la existencia de nuevas tierras. El autor se inclina por la segunda versión. Así es como refleja la leyenda del naúfrago que arribó a azores después de haber llegado a América arrastrado por los vientos, al que Colón habría conocido y participado de un secreto.